El singular suceso se registró en un restaurante de la ciudad de Nueva Jersey, Estados Unidos. Los amigos bebieron licor hasta que el local los invitó a retirarse pues iban a cerrar, por lo que planificaron el hurto.
Bastante molestos los sujetos esperaron en sus autos a que todos los trabajadores del restaurante se retiraran, luego ingresaron y cargaron los bidones. La alarma del local está conectada directamente con una estación policial cercana, por lo que la captura de los ladrones fue cuestión de minutos.
Para mala fortuna de los tres amigos, los 10 barriles se encontraban vacíos. Sin embargo, un robo es un robo, por lo cual Brianna Siegel, Donald Alena y John Buenoguaba tendrán que ir a la cárcel.