El suceso se registró en una escuela secundaria de Holanda. Uno de los compañeros del muchacho dormilón, intentó despertarlo dándole en el brazo con un bolígrafo mientras filmaba el incidente, pero sus esfuerzos fueron en vano. La acción del maestro fue cuestionada por sus demás colegas.
El profesor también trató de despertarlo llamándolo en voz alta, pero no resultaba, luego comenzó a gritar y nada, entonces furioso utiliza un extintor para rociar al muchacho y despertarlo. Su método de impartir disciplina ha sido duramente criticado en las redes sociales.