El suceso se registró en la sala de montaje de motores en la planta de la empresa Volkswagen, ubicada en la ciudad de Kassel, Alemania; cuando el trabajador se encontraba en el interior de una máquina automatizada.
Aparentemente, el robot agarró al hombre y lo presionó contra una placa metálica hasta causarle heridas graves, murió horas después en un hospital cercano.
La portavoz de la empresa, Heiko Hillwig, cree que la instalación pudo haber sido maniobrada por otro empleado desde el exterior de la misma y que no fue el robot el que se descontroló.
"Las causas exactas del incidente aún no fueron establecidas, y se está llevando a cabo una investigación", indicó un representante de Volkswagen. La planta de Kassel cuenta con más de 15.000 empleados.