La auxiliar de enfermería que superó el ébola, Teresa Romero, afirmó que continuará con las acciones legales emprendidas contra las autoridades sanitarias de su país por manchar su nombre y haber sacrificado a su mascota.
“Yo he olvidado todo, menos lo de la muerte de Excálibur, que no es la muerte en sí, sino la forma en la se hizo, sin saber si el perro estaba infectado, no", señaló en declaraciones a una importante cadena de noticias internacional.
Asimismo, consideró que lo más sensato hubiera sido poner a su mascota en cuarentena. "Para ellos es más fácil hacerlo así. Es un atentado, una falta de sensibilidad y de poca humanidad”, indicó.
Por otro lado, se refirió a la época en la que estuvo contagiada con el virus y reveló que se enteró a través de los medios de comunicación que era portadora.
“Yo tenía el teléfono móvil todo el tiempo en mi habitación. Lo enciendo y lo primero que veo es la portada de un periódico con mi fotografía y la de mi perro Excálibur. Leo que ya había dado dos positivos. A mí nadie me confirma ningún diagnóstico”, comentó.