Un amplio informe titulado "National Landmarks at Risk", señala que Estados Unidos corre el riesgo de perder algunos de sus monumentos más simbólicos producto del cambio climático.
El reporte de la organización sin fines de lucro Union of Concerned Scientists-UCS, traza un mapa de una treintena de sitios que están en peligro a causa del aumento de la temperatura, la subida del nivel del mar, los continuos aluviones, incendios y fuertes lluvias.
Uno de los sitios afectados sería la Estatua de la Libertad, que ya fue dañada a causa del cambio climático, pues en 2012, producto del huracán Sandy, se sumergió gran parte de la estatua; la localidad de Ellis Island, donde se encuentra el célebre museo sobre la inmigración, también se encuentra en peligro de desaparecer.
El Kennedy Space Center y la zona de Cabo Cañaveral, en la isla de Merritt, Florida, ya están bajo una amenaza constante, con las rampas de lanzamiento, desde las que partieron las misiones Apolo para la Luna, demasiado cerca del océano producto de la crecida de las aguas.
Además, el documento menciona que Jamestown, en Virginia, primera colonia británica en el continente americano, "probablemente quedará sumergida, por la continua crecida del océano, hacia el final del siglo", predice la UCS.
Pero también la suerte de los parques nacionales, de Yellowstone a Yosemite, está en constante peligro, por los continuos incendios y sequías, así como los cerca de 27 millones de dólares al año vinculados al turismo verde.