El senado de Bélgica aprobó una ley que contempla multas entre 50 y 1.000 euros, e incluso condenas de hasta un año de prisión a quienes realicen comentarios sexistas o proposiciones sexuales a las mujeres en la vía pública.
La iniciativa fue aprobada el mes pasado convirtiendo al país europeo en el primero en considerar los piropos una forma de acoso. Además, se gestó gracias al documental titulado ‘Femme de la Rue’ de la estudiante belga Sophie Peeters en el que se evidencia lo que sufre una mujer al recorrer las calles de ese país.
En el video, la protagonista recibe diferentes tipos de comentarios obscenos, incluso insultos, así como también insinuaciones sexuales explícitas. Lo que comprobaría la encuesta de la ONG Stop Street Harassmen, donde se señala que el 80% de las mujeres belgas de entre 12 y 30 años recibió alguna vez un comentario sexista en la vía pública.