Acción de Gracias: ‘Popcorn’ fue el pavo indultado por Barack Obama

`Popcorn’ fue declarado este miércoles como Pavo Nacional de Acción de Gracias por el presidente estadounidense Barack Obama, luego de que ganara en la votación popular que se realizó en las redes sociales. Así, el ave se libró de ser un plato en su cena de mañana.

En una divertida ceremonia ante la prensa, junto al mandatario y sus hijas, Sasha y Malia, Pocpcorn recibió el indulto y fue coronado como ‘primer pavo de Estados Unidos’. Obama le recordó su fortuna, porque “generalmente hablando, Acción de Gracias es un mal día para ser un pavo”.

El Jefe de Estado alabó la “valentía” de Popcorn y Caramel, el otro pavo indultado y su competidor por el galardón de ‘Pavo Nacional’, que llegaron ayer a Washington desde la granja de Badger (Minnesota) donde nacieron, el 8 de julio, y se criaron durante sus primeras 19 semanas de vida.

Los pavos fueron elegidos tras superar las diversas etapas de un proceso de selección organizado por el granjero John Burkel, presidente de la Federación Nacional del Pavo, en el que hubo otros 78 candidatos, todos ellos destinados al consumo.

Obama ironizó: “Fue casi literalmente ‘Los Juegos del Hambre’”,  en referencia a la saga de novelas juveniles de Suzanne Collins recientemente llevada al cine. “Podemos declarar oficialmente que ‘Popcorn’ es el ganador, demostrando que incluso un pavo con un nombre gracioso puede encontrar un lugar en la política. ‘Caramel’ ahora está un poco ocupado captando fondos para su próxima campaña”.

La elección repitió el formato del año pasado. Así, los internautas votaron a través de Facebook, Instagram y Twitter a su candidato favorito. Desde 1947, la Federación Nacional del Pavo entrega anualmente un ave al presidente de Estados Unidos en una tradición que ya dura 66 años.

Aunque en un principio el regalo era para que los presidentes se lo comieran con su familia en la cena de la fiesta por excelencia del país, John F. Kennedy le perdonó la vida a uno de los pavos que recibió durante su mandato y, cuando George Bush padre repitió el gesto en 1989, quedó instaurada la costumbre.