El Parlamento rumano aprobó en setiembre una ley que autoriza matar a los perros callejeros. Esto debido a la denuncia de los padres de un niño de cuatro años que murió tras ser mordido por unos perros sin hogar. La norma permite sacrificar a los animales que no sean reclamados o adoptados en un plazo de dos semanas.
Sin embargo, la ley provocó una ola de intensas protestas. Centenares de personas marcharon frente al edificio del Tribunal Constitucional en señal de rechazo. Activistas y ciudadanos ordinarios acudieron para elegir una mascota, hacerse cargo de ella y salvarle la vida.
Según el Ayuntamiento de Bucarest, solo en la capital rumana, unos 65.000 perros viven en las calles. Además, se supo que entre 2001 y 2007, unos 145.000 canes callejeros fueron exterminados en dicha ciudad.
Por su parte, la actriz francesa y defensora de los animales, Brigitte Bardot pidió ayuda al presidente de la comisión Europea, Manuel Durão Barroso, rogándole "actuar contra estas matanzas". Además, propuso como solución, alentar la esterilización de los animales vagabundos, pues considera que la muerte de los animales solo ensucia Europa.
