El pánico se desató en un avión de la compañía Egyptair que viajaba desde El Cairo hacia Nueva York. Las autoridades se vieron forzadas a desviar la avioneta al aeropuerto británico de Glasgow Prestwick (Escocia) luego que se descubriera una nota de amenaza a bordo.
Pasajeros indicaron que dentro del baño de la aeronave se encontró una inscripción con la frase "Voy a incendiar este avión" junto a un número de asiento, lo que provocó el terror de las 326 personas a bordo.
Un conjunto de aviones caza fueron dispuestos para escoltar al Boeing 777 que se dirigía al aeropuerto internacional John F. Kennedy. Finalmente aterrizo cerca de las 2 de la tarde y fue rápidamente aislado de la terminal de pasajeros.
Funcionarios de control del tráfico aéreo intentaron ocultar el hecho manifestando que "ocurrió un problema" y la medida se trataba de un "procedimiento estándar".