James Mollison viajó por todo el mundo tomando reveladoras fotos de los dormitorios de diversos niños. Luego compiló en un libro, titulado "Donde Duermen los niños", cada una de estas fotografías con su respectiva historia. Las diferencias entre cada habitación es sorprendente.
"El proyecto se convirtió en un vehículo para pensar acerca de la pobreza y la riqueza, sobre la relación de los niños con sus posesiones y el poder", dice Mollison.