Barack Obama inició este sábado, los primeros mítines de su campaña electoral, con el fin de ser reelegido como presidente de los Estados Unidos. Atacó al republicano Mitt Romney por aprender las "lecciones erradas" como ejecutivo de negocios y prometió mover hacia adelante la economía si gana un segundo mandato.
Obama lanzó formalmente su campaña por la reelección el año pasado en Chicago, pero desde entonces sus eventos políticos oficiales se han limitado a reuniones para la recaudación de fondos.
Dirigiéndose a animadas multitudes en Ohio y Virginia -dos estados que podrían ser claves para mantenerlo en la Casa Blanca-, Obama intentó recuperar el impulso que alimentó su victoria del 2008, mientras se concentraba en el probable candidato del Partido Republicano.
Obama, vistiendo una camisa sin chaqueta ni corbata, llamó a Romney -ex gobernador del estado de Massachusetts y ex ejecutivo de capital privado- un "estadounidense patriota" cuyas políticas no ayudarían a la clase media.
"El administró una gran firma financiera y administró un estado, pero creo que ha extraído las lecciones equivocadas de esas experiencias. El cree sinceramente que si presidentes ejecutivos y acaudalados inversores como él, hacen dinero, el resto de nosotros también prosperaremos automáticamente", dijo Obama en Columbus, Ohio.
Romney cita con frecuencia su pasado como líder empresarial como una fuerza que podría ayudarlo a crear empleos e impulsar el crecimiento, acusando a Obama de no hacer lo suficiente para sacar a la economía de Estados Unidos de su baja actividad.
En los eventos, Obama dijo que no estaba satisfecho con el avance económico del país, pero que Romney empeoraría las cosas al recortar impuestos para los muy ricos y mantener la visión errada de que mayores ganancias conducirán a mejores empleos.
"El gobernador Romney parece no entenderlo. Parece que no entiende que maximizar ganancias por cualquier medio necesario -ya sean despidos, o tercerizaciones o evasión tributaria o disolución de sindicatos- probablemente no siempre sea bueno para el estadounidense promedio o para la economía estadounidense", manifestó el presidente.
"¿Por qué otro motivo querría él gastar billones más en recortes tributarios para los estadounidenses más ricos? ¿Por qué otra razón propondría reducir sus propios impuestos al mismo tiempo que se los sube a 18 millones de familias trabajadoras" añadió Obama.