El tema de los inmigrantes se ha vuelto una realidad cotidiana en cada rincón del mundo. Particularmente en Estados Unidos tras el triunfo en las elecciones de Donald Trump. Es por ello que la última edición de los Premios Grammy no se ha quedado atrás, tomando partido por ellos.
En la ceremonia de los premios más importantes de la industria musical celebrada ayer en el Madison Square Garden de Nueva York (Estados Unidos), varios artistas dieron su apoyo abierto a los inmigrantes, rechazando en forma muy sutil las políticas del gobierno de Washington.
Entre ellos estuvo la cantante de origen cubano Camila Cabello, quien rindió tributo a los ‘dreamers’, los indocumentados que llegaron al país siendo niños y que se encuentras protegidos por el programa DACA (entre los que hay peruanos) y que hoy ven en riesgo sus posibilidades.
Cabello, quien presentó a la banda U2, habló mientras las imágenes de la Estatua de la Libertad brillaban tras ella, afirmando que el país fue construido “por dreamers, para dreamers que persiguen el sueño americano”.
“Soy una orgullosa inmigrante cubano-mexicana, nacida en La Habana (…) y todo lo que sé, justo como los dreamers, es que esos chicos no pueden ser olvidados, y vale la pena luchar por ellos”, dijo. Luego aparecieron las famosas líneas de Emma Lazarus, escritas al pie de la estatua.
“Dame tus cansadas, agotadas, acurrucadas masas deseando respirar aire libre…” dice el fragmento del soneto ‘El nuevo coloso’, que fue mostrado junto con la Estatua de la Libertad antes de que U2 entrara en escena.
En una barcaza cerca al monumento, la banda irlandesa U2 se encargó de interpretar el tema ‘Get Out of Your Own Way’ en un claro mensaje proinmigración, mientras un montaje de personas de diferentes países aparecía tras ellos. Sin embargo, guardaron lo más contundente para el final.
Tras concluir la canción y a través de un megáfono, el vocalista Bono recordó las polémicas palabras que Donald Trump habría pronunciado hace unas semanas en una reunión en la Casa Blanca al decir: “Benditos son los ‘Países de M...’ porque ellos nos dieron el Sueño Americano”.
Por su parte el artista Logic interpretó su primer éxito internacional ‘1-800-273-8255’, convertido en un himno de prevención contra el suicidio, pero no evitó el tópico, también centrándose en la controversia del mandatario estadounidense.
“A todos los países hermosos del mundo llenos de cultura, diversidad y miles de años de historia, ustedes no son ‘países de m...’”, evocando igualmente el soneto de Lazarus que recibió a miles de personas de todas partes el mundo a lo largo de la historia en la Bahía de Nueva York.
“En nombre de aquellos que luchan por la igualdad en un mundo que no es igual, no es justo y no está listo para el cambio que estamos aquí para traer, les digo: ‘tráigannos a sus cansados, pobres y cualquier inmigrante que busque refugio’”
“Porque juntos podemos construir, no solo un país mejor, sino un mundo que está destinado a estar unido”, finalizó. Sin duda la inmigración se ha convertido un fenómeno global cuya influencia, ya a favor o en contra, se ha vuelto inevitable.
Por otro lado, este ha sido uno de los Grammys con más fuerte carga política de los últimos tiempos, marcado especialmente por la aparición de varias figuras, entre ellas Hillary Clinton, leyendo el libro ‘Fire and Fury (Fuego y Furia)’, un relato casi surreal del primer año de Gobierno de Trump.