El Día del Soltero, que nació en 1993 en la Universidad de Nankín, fue ideado por un grupo de jóvenes que querían crear un espacio para celebrar la soltería sin las presiones de la sociedad.
El 11/11 fue elegido porque el número “1” representa la individualidad y, al repetirse, simboliza a quienes no tienen pareja. Con el tiempo, esta celebración trascendió las aulas universitarias y llegó a convertirse en un fenómeno global, especialmente en China y el sudeste asiático, donde el matrimonio sigue siendo altamente valorado.
En 2012, el gigante de comercio electrónico Alibaba registró el término “Doble 11” y lo convirtió en un evento de ventas masivas en línea. A partir de entonces, la fecha ha acumulado cifras astronómicas, con ventas que alcanzaron los 38,300 millones de dólares en 2019, posicionándose como uno de los días más lucrativos para el comercio digital.
IMPACTO ECÓNOMICO Y SOCIAL
Desde su lanzamiento en Alibaba, el Día del Soltero se ha transformado en una oportunidad clave para el comercio global, compitiendo en popularidad con eventos como Black Friday y Cyber Monday.
Asia se ha convertido en el principal foco de esta festividad, donde países como Indonesia celebran el “Harbolnas” o Día Nacional de las Compras en Línea. Esta popularidad ha atraído a marcas de todo el mundo, que ofrecen promociones exclusivas y descuentos en productos para incentivar el consumo y la autoindulgencia.
Además de su faceta comercial, el Día del Soltero ha evolucionado para incluir un mensaje de autoaceptación y empoderamiento personal, valores cada vez más celebrados en las nuevas generaciones. En el Reino Unido, una festividad similar en marzo también promueve la independencia y el valor de estar soltero, recordando que la soltería no es un estado incompleto.
UN FENÓMENO CULTURAL GLOBAL
Mientras en gran parte de Asia el 11 de noviembre se celebra en un ambiente de consumo masivo, en otros países su significado es diferente.
En Bélgica, por ejemplo, coincide con el aniversario del Armisticio de la Primera Guerra Mundial, lo que aporta una connotación histórica a la fecha. Este contraste cultural no ha detenido la expansión del marketing vinculado al Día del Soltero, que en Europa continúa ganando terreno.
Sin embargo, en cada país el enfoque varía: en algunos lugares se considera una oportunidad de reflexión sobre el valor de la soltería, mientras que en otros, la prioridad es el impulso al comercio.
Este fenómeno global refleja un cambio cultural en la percepción de la soltería y en cómo la sociedad ve la independencia personal.
CELEBRACIÓN DE LA SOLTERÍA Y EL AMOR PROPIO
Más allá del enfoque comercial, el Día del Soltero se ha convertido en una celebración de la independencia y del amor propio. Lejos de ser solo un día de consumo, para muchos representa una oportunidad de abrazar la individualidad y la libertad de elección. En un mundo cada vez más interconectado, la celebración de este día resuena con quienes buscan un equilibrio entre su crecimiento personal y sus relaciones.