Muchos aprovechan las vacaciones de los colegios para viajar en familia a algún destino turístico dentro o fuera del país. Los vuelos en avión pueden llegar a ser una experiencia muy emocionante para los menores o, por el contrario, todo un calvario para los padres y para ellos por los nervios que supone el encontrarse en el cielo y en un espacio cerrado durante muchas horas.
Aquí te presentamos una lista de consejos, elaborados por el padre y escritor de viajes Chris Schalkx, que puedes tomar en cuenta al momento de subirte a un avión con niños.
ASIENTOS EN LA PARTE DELANTERA O TRASERA DE LA CABINA
Lo primero que recomienda es reservar los asientos con anticipación para tener la opción de escoger la parte trasera o delantera del avión, ya que están más cerca de los baños y de la tripulación de cabina; no obstante, sugirió a The Washington Post que solo los adultos estén sentados en el asiento del pasillo, ya que los menores podrían sacar sus manos y golpear a alguien que esté pasando o ser impactados por los carritos de comida.
HORARIOS DE SUEÑO DE LOS NIÑOS
El experto en viaje instó a los padres a intentar planificar los viajes en función al horario de sueño los niños y recomendó escoger los vuelos nocturnos para que los pequeños puedan dormir durante el trayecto; además de evitar viajar en días festivos o fines de semana, ya que los vuelos suelen estar llenos y son más propensos a sufrir retrasos.
¿QUÉ NO DEBE FALTAR EN TU MALETA DE MANOS?
El viajero relató a The Post un aprendizaje que obtuvo luego de “empaparme los pantalones en pleno vuelo, por un pañal que goteaba, aprendí esta lección de la manera más difícil”. El especialista recomienda que los padres lleven una muda de ropa en el equipaje de mano tanto para ellos como para los pequeños para evitar posibles accidentes; además, destaca la importancia de cargar con un pañal extraíble, un paquete de toallitas húmedas y una botella con atomizador de desinfectante.
LLEGA TEMPRANO AL AEROPUERTO
Para Schalkx llegar a tiempo al aeropuerto es fundamental para evitar estrés innecesario, ya que con ese tiempo se pueden atender con mayor calma sucesos que pueden irse desencadenando en el camino como pausas para ir al baño, pérdida de un juguete, etc.
CONVERSA CON TU PEQUEÑO ANTES DEL VIAJE SOBRE POSIBLE DOLOR DE OÍDO
La conversación entre padres e hijos sobre los posibles cambios que puede llegar a experimentar durante el vuelo es muy importante para evitar que reaccionen de forma brusca ante ellos. Por ejemplo, es normal que puedan llegar a sentir un ligero dolor de oídos al despegar, pero si son advertidos antes, posiblemente tengan una mejor respuesta ante dicha incomodidad.
(Con información de La Tercera)