Ya se siente el espíritu de la Navidad por todos lados. Es la época del año en la que se viaja desde cualquier parte para compartir con la familia y en la que importan los detalles y el cariño. Hoy te mostramos algunas curiosidades sobre los adornos más populares.
Corona: por su forma circular representa la vida eterna; en la fe cristiana es símbolo del amor infinito de Dios y la corona de espinas de Cristo. Es similar a la corona de Adviento, por lo que la puedes distinguir principalmente por dos detalles: la de Navidad se coloca en la puerta o en una superficie vertical, mientras que la de Adviento reposa sobre una mesa o mesón.
Campana: es un símbolo de alegría. Antiguamente se creía que su repicar ahuyentaba a los malos espíritus y en el imaginario cristiano resuenan para anunciar al mundo la llegada del niño Jesús.
Bola: por su forma esférica y su lustre brillante pretende emular a una manzana. Se creía que estas frutas eran el símbolo de la fecundidad de la tierra y ayudaban a acercar al ser humano a los espíritus de la naturaleza. En el imaginario cristiano; sin embargo, representan la tentación y se cree que su origen se remonta al Siglo VIII, cuando San Bonifacio usó manzanas para adornar el abeto.
Vela: se cree que la luz que emana aleja a los malos espíritus y que; sin embargo, al quemarse atraen buenos augurios según el color de la cera: amarillo trae dinero, el rojo trae amor y pasión, y el blanco trae paz y serenidad. Para los cristianos en Navidad simboliza el nacimiento de Dios, porque Jesús nació en el portal a la luz de una vela.
Estrella: este adorno simboliza esperanza y luz. Durante el nacimiento del niño Jesús en Belén la estrella de Oriente se iluminó para anunciar su llegada y fue la que guió a los tres reyes magos al pesebre, donde regalaron al niño oro, incienso y mirra.
Muérdago: es una planta con una amplia tradición mágica. Ellos celebraban ceremonias bajo las ramas de este árbol y creían que sus frutos tenían poderes curativos, pero que en grandes dosis podía ser letal. Hoy se sigue otorgando al muérdago cualidades asociadas con el amor, la fertilidad y la buena suerte, por eso mucha gente cuelga una ramita en el umbral de su puerta.
Piña: se utilizan mucho para decorar en Navidad porque tiene un simbolismo asociado a la familia. Por un lado, representan la unidad familiar y, por otro la lealtad con los secretos. En esta época se pintan de dorado o plateado para crear centros de mesa o decorar el árbol.
Flor de Pascua: sus colores, rojo (que representa el amor) y verde (que representa la esperanza), hacen que sea fácil relacionarla a la Navidad, pero se dice que se asoció a las festividades de Pascua en el siglo XVI, cuando los frailes misioneros franciscanos empezaron a decorar los altares que conmemoraban el nacimiento de Jesús con estas plantas, pues florecían justo en esas fechas.