En una centro comercial ubicado en Georgia, Estados Unidos, un sujeto tuvo la espectacular idea de querer probar la cama elástica, pero de una manera poco convencional.
Desde un segundo piso, el hombre se paró sobre la cornisa del pasadizo y se arrojó hacia la cama elástica ubicada justo debajo de él.
Apuesto a que la próxima cosa que probará será una prótesis de cadera. Eso debió doler.