Fue el menor de los hijos del artista, Joao Aguilera, quien develó un documento médico oficial en el que se detalla los padecimientos de su progenitor.
El certificado señala que un día antes de su muerte, el artista sufría problemas respiratorios y acumulación de flema. Para la mañana del 28 de agosto de 2016, Juan Gabriel pidió un tanque de oxígeno, ya que no podía respirar bien.
Finalmente, en su camino al baño de su residencia, el afamado cantante y compositor se desvaneció, motivando el llamado y arribo de los servicios de emergencia, según cita el sitio mexicano El Mañana.
El documento, presentado en el programa El Gordo y La Flaca de la cadena Univisión, concluyó que la muerte del cantante Juan Gabriel se debió también a su largo historial de problemas de salud: hipertensión arterial, diabetes mellitus y colesterol alto.
La muerte del artista generó polémica y controversia en su momento, ya que su cuerpo no fue inmediatamente examinado por oficiales forenses a petición de la familia.