¿Sufres por tu teclado sucio? Con estos trucos puedes dejarlo impecable

Uno de los dolores de cabeza para quienes usamos una computadora en el trabajo o en la casa es el tener el teclado sucio, lo que puede ocasionar que las teclas dejen de funcionar o que se queden pegadas al momento de intentar escribir.

Esta es una de las primeras y principales partes de la máquina en ensuciarse, pues está en contacto directo con nosotros, sobre todo cuando acostumbramos comer muy cerca de él. Por ello aquí te presentamos tres formas curiosas pero efectivas de deshacerte de esa molesta suciedad.

Post-it

¡Las notas más famosas en la oficina sirven prácticamente para todo, incluso para limpiar teclados! Basta con tomar una hoja y deslizarla con la parte adhesiva por los bordes o ranuras del teclado. Así el polvo y la suciedad quedarán atrapados en el pegamento.

Masa elástica

Puedes hacer tu propio ‘slime’ en casa  utilizando dos cucharadas de pegamento o cola blanca, una cucharada de agua, cuatro cucharaditas de bórax y cuatro cucharadas de agua. Luego, en un recipiente agregar el pegamento y una cucharada de agua y mezclar bien.

En otro tazón mezcla el bórax y las cuatro cucharadas de agua y disolver. Echa el contenido del primer tazón en el del bórax y mézclala bien hasta que espese. Así tendrás lista esta masa elástica y viscosa que te ayudará a limpiar.

Para hacerlo solo debes colocarla sobre el teclado, al retirarla verás cómo por su consistencia se introduce y atrapa toda la suciedad entre las teclas. Cuando termines sólo guárdala en un frasco hermético o bolsa bien sellada. Esto no mancha y es un desinfectante natural.

Cuchillo

Algo tan simple como el cuchillo de mesa que utilizas todos los días a la hora de comer puede ayudarte a limpiar tu teclado, para esto tienes que envolverlo con un trapo alrededor de su punta redondeada y procurando que la tela quede muy apretada.

Luego solo humedece un poco el trapo con desinfectante o agua y pásalo por entre las teclas, pero ten cuidado al raspar la superficie. Puedes humedecer el trapo un poco más si está muy seco, pero cuida siempre que no caiga ni una gota dentro.

Tras la limpieza pasa un paño seco y limpio por encima del teclado. ¿Qué te pareció? Estos métodos son sencillos, rápidos e incluso pueden resultar divertidos, amén de sacarte de apuros. Pruébalos y elige tu favorito.