Dicen que el sonido del mar puede ser algo muy relajante y tan placentero como escuchar algunas de tus melodías favoritas, sin embargo, un arquitecto croata tuvo una genial idea que le dio un agregado a esta experiencia.
Resulta que en 2005 Nikola Bašić diseñó un órgano musical de 230 pies de largo que convierte el ritmo de las olas en una melodía única e irrepetible. Se trata de un instrumento musical experimental que produce música por medio del empuje de las olas y una serie de tubos situados por debajo de un gran conjunto de escalones de mármol.
Los sonidos emergen de una serie de perforaciones a lo largo de toda la parte superior de la estructura. Imagina caminar junto al Mar Adriático y disfrutar de la brisa mientras los escalones del órgano gigante interpretan para ti el sonido del océano. ¡Una experiencia única!