Nadie sabe por qué lo ocultaba, pero el secreto acaba de ser develado. La artista había puesto a la venta su lujosa mansión de Miami Beach de la forma más discreta posible, para evitar verse involucrada en la millonaria transacción.
Shakira ha recurrido a intermediarios para que su nombre no figure en la venta de la ostentosa residencia, valorada en unos diez millones de dólares, según informa el diario The New York Post.
Se conoció que ya hay personas interesadas en la vivienda, adquirida por la artista el 2001, que tiene siete amplias habitaciones, ocho baños, además cuenta con piscina y embarcadero propio.
Trascendió que la cantante está cansada de la propiedad, a pesar de que en 2011, le hizo importantes reformas. La casa está muy cerca a las mansiones de Matt Damon, Jennifer López y Ricky Martin.
No es la primera vez que Shakira ha intentado vender la casa. En 2013 la puso al mercado sin ningún éxito, por lo que se vio obligada a bajar el precio en casi millón y medio de dólares.