¿Cuántas veces hemos oídos que los videojuegos sirven como desahogo? Aunque en realidad muchos sugieren que los juegos no sirven para nada, algunos estudios aseguran que jugar favorece ciertas aptitudes y tiene un cierto efecto terapeútico.
Desgraciadamente, también hay investigaciones que apuntan en dirección contraria: los videojuegos pueden causar ansiedad en los jóvenes. Según un estudio realizado por una universidad de Taiwan, los juegos causan una reacción de ‘luchar o huir’, que activa la segregación de adrenalina. El peligro está en que no tomamos ninguna acción física para disminuirla. Llevar la adrenalina a semejante nivel sin una respuesta física puede causar una sobrecarga peligrosa.
El estudio de la universidad de Kaohsiung afirma que los jugadores obsesivos exhiben los rasgos neurológicos de los drogadictos; sin embargo, hay quienes no están de acuerdo con estas afirmaciones. Por lo pronto, te dejamos algunas fotos hilarantes de gamers que terminaron totalmente estresados por no saber perder.