La más insólita y divertida celebración de un gol se realiza cada año en Canadá. Una lluvia de osos de peluche caen sobre la cancha de juego del Calgary Hitme, un equipo de hockey sobre hielo muy popular en esta parte de Norteamérica.
Esta curiosa celebración ya tiene dos décadas y se realiza para incentivar a los fans del hockey a contribuir en la Navidad con un regalo para los niños pobres de un alberge.
En esta ocasión, el equipo pidió a sus seguidores llevar un peluche al campo y arrojarlo a la cancha cuando anoten el primer gol. Los más de 17 mil fanáticos respondieron positivamente al llamado de sus ídolos deportistas, por lo que 26.919 muñecos inundaron la cancha de hielo.