Los esposos Julio Cortés y Ruth Bravo, acusados de asesinar a un vigilante meses atrás, motivo por el cual pasaron más de diez días en prisión, clama por su inocencia y piden que los dejen de insultar en las calles por un delito que no cometieron.
La noche del martes ambos personajes fueron entrevistados en el programa Enemigos Públicos, donde en compañía de su abogada enfatizaron su inocencia, mientras que la defensa legal se ampara en la necropsia para desbaratar los argumentos por los que culparon a dicho matrimonio.