Cada segundo domingo de mayo en Perú, se celebra el Día de la Madre, una fecha que es mucho más que una festividad, es un recordatorio del amor incondicional, enseñanzas, dedicación y sacrificios de mamá.
Un equipo de El Dominical recorrió las calles de Lima y encontró a varias madres de familia que trabajan durante la madrugada y les hizo entrega de un pequeño presente que incluía una rosa y un chocolate.
Sostienen a sus familias
La mayoría de las entrevistadas indicaron que salen a trabajar durante la noche y hasta llegan a amanecerse en las calles porque son el pilar de su hogar y tienen que sostener económicamente a su familia.
Historias de admiración
Algunas historias incluyen a mujeres que son ejemplares porque no crecieron junto a sus madres desde niñas, y se vieron en la obligación de salir a las calles a trabajar desde pequeñas para poder sobrevivir.
Mujeres que con los golpes de la vida se han vuelto resilientes y a pesar de sentir nostalgia por las pérdidas de sus madres, continúan siendo un ejemplo para sus hogares, incluso soportando las bajas temperaturas durante la madrugada.