Un milagro en plena pandemia de Covid-19. Brayan, un adolescente de 14 años, tuvo que pasar por un trasplante de riñón para salvar su vida, debido a una enfermedad renal crónica. La intervención se llevó a cabo en noviembre del 2020.
Un equipo multidisciplinario de cirujanos, anestesiólogos, enfermeras, urólogos e instrumentistas experimentados en transplantes de órganos sólidos participó en la exitosa operación que duró aproximadamente 9 horas.
Desde el 2017 el Instituto Nacional de Salud del Niño-INSN de San Borja ha realizado 23 transplantes de órganos sólidos a menores entre 1 y 17 años, de los cuales 19 son trasnplantes renales y 4 hepáticos.