En total abandono, así se encuentra el perímetro del Congreso de la República, columnas, escaleras, pisos, rejas, etc. presentan serios daños desde hace bastante tiempo.
Además de suciedad, parece que en años no ha recibido mantenimiento. Sería importante que los legisladores se preocupen un poco más por este monumento nacional.
Lamentablemente, los ambulantes, vecinos y transeúntes colaboran con el deterioro, pintarrajeando paredes, arrojando basura y aguas servidas en los alrededores.