Aunque parezca increíble en el norte de california se emitió una alerta de no consumir el mencionado producto procesado que estaba contaminado con una peligrosa bacteria.
Decenas de personas fueron víctimas de este queso para nachos, una de ellas no pudo sobrevivir a la peligrosa toxina. Martín Galindo-Larios sufrió una muerte cerebral en un hospital de San Francisco luego de contraer botulismo cuando comió una salsa de queso para nachos.
Las autoridades de salud, retiraron la mencionada salsa de queso de la gasolinera que la vendía. Por su parte la empresa fabricante aseguró que el lote de queso en cuestión está libre de contaminación según los análisis de un laboratorio independiente.