El aumento de la humedad y la presencia de alérgenos como el moho y los ácaros del polvo, pueden desencadenar diversas afecciones, desde alergias hasta crisis asmáticas.
Según Consuelo Rojas, médica veterinaria de Aristocat, la diferencia entre el asma y las alergias radica en que el asma es una enfermedad que genera dificultades respiratorias, mientras que las alergias se producen como reacción a elementos externos.
"Visitar al veterinario es fundamental para obtener un diagnóstico preciso y conocer el tipo de tratamiento que necesita la mascota. Esto ayudará a los dueños a estar mejor informados sobre cómo actuar en caso de una crisis y mejorar la calidad de vida de su animal", señala la experta para Perú21.
¿CUÁLES SON ESTOS SÍNTOMAS?
Asma:
- Tos y respiración sibilante
- Dificultad para respirar
- Fatiga
- Postura incómoda
- Aumento de la frecuencia respiratoria
Alergias:
- Estornudos
- Ojos irritados y llorosos
- Congestión nasal
Además de estar atentos a estos signos, es importante ayudar a nuestras mascotas a adaptarse gradualmente a los cambios de temperatura.
Debemos verificar su dieta, realizar los chequeos correspondientes y procurar un ambiente cálido y confortable, especialmente en el caso de los gatos, que suelen buscar refugio en los espacios más calientes de la casa durante el invierno.
