El pecado no perdonado por Dios es la blasfemia contra el Espíritu Santo, un concepto de gran importancia dentro del ámbito religioso.
El Evangelio de Mateo, en su capítulo 12, versículo 31, relata un incidente en el cual los fariseos, un grupo religioso judío, intentaron desacreditar las obras de Jesús atribuyendo su poder al "Príncipe de los demonios".
En respuesta a esta actitud, Jesús estableció una excepción al perdón divino, diciendo: "Por tanto, os digo que todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres; pero la blasfemia contra el Espíritu no será perdonada" (Mateo 12:31).
DEBATE
A lo largo de los siglos, este pasaje bíblico ha generado un intenso debate teológico, con diferentes interpretaciones sobre qué constituye exactamente la blasfemia contra el Espíritu Santo y cuáles son sus implicaciones espirituales.