Víctor Quijada señala que ante el problema entre el Estado peruano y Odebrecht a raíz del caso del gasoducto sur, pueden plantearse las siguientes soluciones, por un lado se tiene la necesidad de seguir con las investigaciones y se sancione a los responsables, y por otro el reconocimiento del gasto de infraestructura. El Estado debe priorizar una solución adecuada bajo la fórmula de ganar ganar.
Señala que podría negociarse un nuevo convenio de colaboración eficaz o ampliar el ya existente, a cambio de que Odebrecht termine de entregar la información faltante, en esta se reconozca la devolución del dinero en infraestructura que puede ser producto de la venta de los activos y se cobre la reparación civil producto de la venta, a cambio se desista de la demanda arbitral.
Otro escenario podría ser la nueva licitación del proyecto en donde al existir activos que no son de propiedad del Estado, la nueva empresa adjudicataria le reconozca los gastos de inversión al consorcio, sin perjuicio de ello también Odebrecht puede desistirse del arbitraje y continuar las investigaciones.
Finalmente, el otro escenario podría ser que la vía arbitral continúe y a pesar que dos de las pretensiones no serían amparadas por el tribunal internacional, por la doctrina de las manos limpias no se amparan contratos que derivan de la corrupción, si el tribunal está en facultades de promover un acuerdo parcial o total respecto al reconocimiento del pago en infraestructura, mientras tanto las investigaciones siguen.
