Ericka y Karen son cuñadas que no pueden verse ni en pintura. Han convertido el vecindario en 'una guerra' tras los continuos problemas y discusiones. Lejos de sentirse una familia, los pleitos han llegado al punto de agarrarse de los golpes, según contaron en el reportaje para Dilo Fuerte.
Cuando Ericka conoció a Carlos, su pareja actual, este tenía dos hijos de otro compromiso. Todo marchaba bien entre las cuñadas, incluso hasta eran mejores amigas. Sin embargo, las peleas comenzaron desde que Ericka quedó embarazada.
"Comenzó a dejarle la ropa descuidada a los bebés (de la anterior relación), no hacía los quehaceres. (Ericka) decía estoy cansada, voy a ver a la niña (la bebé que recién nació)", cuenta Karen.
Ante esa situación, uno de los menores del anterior compromiso quedó a cargo de Karen, quien hasta la fecha lo cuida y vela por su bienestar, por esa razón es que le pide dinero al hermano para que provea para su alimentación y educación.
La hermana de Carlos está convencida que su cuñada no lo quiere a su hermano y que solo lo manipula. Además la acusa de haber descuidado a los bebés. En tanto el hermano, quien trabaja todo el día, asegura que un día le va a dar un derrame cerebral por tanto problema.