Con la clasificación asegurada, Chile y Perú jugarán el martes con menos presiones su último encuentro por el Grupo C de la Copa América, aunque los chilenos quieren ganar para mantener el primer puesto y su virtual localía en el oeste argentino.
La victoria de Colombia sobre Bolivia 2-0 el domingo aseguró que los países vecinos del Pacífico, ambos con cuatro puntos, pasarán de ronda luego que los dos vencieron a México y empataron con Uruguay. En consecuencia, ambos entrenadores anunciaron que harán varios cambios.
Apoyado por decenas de miles de compatriotas, Chile se ha sentido local en las occidentales San Juan y Mendoza, vecinas con su país, y querrá vencer para asegurarse el primer puesto, que garantiza jugar cuartos de final en la primera ciudad y una eventual semifinal en la segunda.
El buen fútbol y el ataque vibrante del equipo chileno dirigido por el argentino Claudio Borghi lo han marcado como uno de los mejores equipos de la primera ronda.
Borghi no reveló su once titular para la última fecha y, una vez más, enfrenta decisiones en la posición de enganche. Luego de entrenar separado el lunes, el titular del debut contra México, Matías Fernández, está prácticamente descartado por una lesión muscular y Jorge Valdivia, que entró en el segundo tiempo contra Perú, está recuperado de la suya. Claro que Borghi había optado por Luis Jiménez desde el arranque en el último partido y al parecer repetirá en éste.
Además, Chile tiene cinco amonestados y Borghi preservaría a la mayoría: Pablo Contreras, Claudio Bravo, Alexis Sánchez, Arturo Vidal y Gonzalo Jara. "Es probable que mañana entremos con tres o cuatro jugadores diferentes", dijo Borghi en una entrevista con la cadena televisiva Fox.
Los chilenos prometieron mantener la apuesta al control del balón que han mostrado en lo que va del torneo y salir a ganar. "Queremos ser primeros del grupo, que es el objetivo principal en este momento", dijo el defensor Pablo Contreras.


