Cada vez se gasta más dinero en comprar jugadores de fútbol a diferentes clubes. ¿Qué es lo que está sucediendo? Te lo mostramos al detalle.
La situación de la inflación en los fichajes de fútbol
En el 2023, las apuestas con Skrill se han transformado en unas de las alternativas más utilizadas por los jugadores que deciden poner a prueba sus conocimientos en los torneos de fútbol. Generalmente, lo hacen con las ligas de Europa, como la Serie A, la Ligue One o la Premier League, además de otros torneos internacionales, como la UEFA Champions League.
Para mantener el nivel, las instituciones necesitan hacer fichajes de gran calidad, año tras año. Y los valores parecen incrementarse cada vez más, debido a la inflación futbolística. Lo que solía ser un mercado relativamente estable y controlado se ha convertido en un escenario donde los traspasos millonarios son cada vez más comunes.
Todo comenzó en los años 90, cuando los traspasos de jugadores por sumas millonarias eran raros y considerados excepcionales. Sin embargo, a medida que los clubes empezaron a generar mayores ingresos a través de acuerdos comerciales y derechos de televisión, se abrió la puerta a fichajes más costosos.
Jugadores como Luis Figo, Zinedine Zidane y Cristiano Ronaldo rompieron récords de transferencias en su momento, sentando las bases para la escalada de precios que vendría. Como un ejemplo paradigmático, la llegada de CR7 al Real Madrid en el 2009 supuso un “boom” por costar casi 100 millones de euros.
Los clubes con poder económico y los precios de transferencia
La creciente influencia de los agentes de jugadores y la aparición de clubes con poder económico han contribuido a la inflación en los fichajes. Los agentes, buscando el mejor trato para sus representados, pueden aprovechar las ofertas de múltiples clubes interesados en un jugador para impulsar el precio de la transferencia.
Por ejemplo, en 2017, el Paris Saint-Germain pagó una cifra récord de 222 millones de euros al Barcelona por el traspaso de Neymar. Este tipo de acuerdos han establecido nuevos estándares en el mercado. Incluso, haciendo que haya algunos fichajes que no tienen tanto reconocimiento, pero que igualmente costaron millones.
El ejemplo más notorio de la última temporada se dio con el ucraniano Mykhailo Mudryk. Si bien es considerado como la estrella de Ucrania, su valor parece lejos de la realidad de su rendimiento. El club inglés ha pagado un total de 100 millones de euros, una cifra que, hace más de 10 años, representaba el arribo de CR7 al Real Madrid.
Esta diferencia es notoria, ya que el luso era, en aquel momento, uno de los mejores futbolistas del presente. Mudryk, si bien tenía un gran potencial, todavía no era considerado siquiera en el top 50. Así, se demuestra que, durante los últimos años, los clubes necesitan desembolsar más dinero para hacerse con futbolistas de buen prestigio.
Así, la inflación en los fichajes del fútbol es una realidad que ha transformado el mercado. Múltiples factores, como el aumento de los ingresos de los clubes, la influencia de los agentes, la atención mediática y el valor comercial de los jugadores, han contribuido a este fenómeno. ¿Seguirá en alza? Pues todo apunta a que sí.
