“Dios es perfecto, pero el ser humano es infinito”, reza un dicho que no puede ser más cierto, pues no hay limitación a la que no pueda sobreponerse. Para muestra, este gol maradoniano que nos regaló nada menos que un futbolista invidente en los Juegos Paralímpicos Río 2016.
Esta tremenda jugada ocurrió en el encuentro en fútbol 5 entre las selecciones de Irán y Marruecos. Fue el volante iraní Behzad Zadaliasghari quien sorprendió a los asistentes del Centro Olímpico de Tenis con esta pintura que no tardó en ser compartida en Facebook.
Cerca al mediocampo, Zadaliasghari se hizo con el balón y con pura habilidad se deshizo de sus rivales para perfilarse ante el arco de Samir Bara y sacar un potente remate cruzado que no pudo ser contenido por el guardameta.
El guía de la selección fue presa de la emoción y entró al campo para abrazar al número 10. Según las reglas, el fútbol para invidentes se juega con cuatro jugadores ciegos por equipo y un portero no ciego, con dos tiempos de 25 minutos.