La tara del racismo empaña el deporte y, aunque los casos más notables y vergonzosos se conocen en el fútbol común, otros deportes bastante menos conocidos como el fútbol australiano no están libres de vivir estos episodios repudiables.
Este hecho ocurrió en Australia, en donde durante el partido entre Adelaide Crows y Port Adelaide Football Club el pasado sábado, una aficionada de Port Adelaide arrojó una banana desde las tribunas al jugador Eddie Betts, de los Crows.
Testigos contaron que momentos antes, la mujer había hecho una señal insultante a Betts, de raíces aborígenes, con el dedo medio. Toda la secuencia quedó registrada en video. Inmediatamente el equipo de esta mala fan condenó el hecho.
No solo eso, Port Adelaide FC la castigó vetándola de por vida en su estadio. El incidente generó tal ola de indignación que incluso el premier de Australia Meridional, Jay Weatherill, calificó de “idiota” a la joven y saludó la inmediata reacción del club.