"Traidores" e "hijos puta", estos fueron los dos calificativos que Mourinho les puso a los jugadores del Real Madrid tras un empate contra el FC Barcelona que terminó por distanciarle en la lucha por el título liguero.
El discurso se recoge al completo en su nuevo libro 'The Special One: the dark side of Jose Mourinho' y que el diario británico 'The Times' ha publicado con antelación. No contento con insultar a sus futbolistas, también intentó distanciar a los jugadores de la Selección cargando duramente contra la identidad cultural de Xavi, Puyol o Piqué.
Según publica 'The Times', mientras Mourinho estuvo ocupando el banquillo del Real Madrid, impuso un riguroso seguimiento y control de todo lo que se publicaba acerca de la plantilla. El técnico portugués exigió que todas las mañanas se le presentase un dosier de prensa con un análisis pormenorizado de todas las noticias que salían en los medios de comunicación. Llegó incluso a buscar micrófonos ocultos en su despacho en un intento por descubrir cuál era la fuente de información de los periodistas. Finalmente, apostó firmemente por la hipótesis del 'topo' y mandó también un estudio sobre los registros telefónicos de algunos 'pesos pesados' del vestuario y empleados del club.
Mou explotó tras el empate a uno contra el Barça y culpó a sus jugadores de ser unos traidores al haber filtrado la alineación días antes del encuentro. Así se expresó en el vestuario blanco:
"Sois unos traidores. Os pedí que no dijeráis nada sobre la alineación pero me habéis traicionado. Me demostráis que no estáis de mi lado. Sois unos hijos de puta. El único amigo que tengo en este vestuario es Granero y ni siquiera estoy seguro de que pueda confiar en él nunca más. Sois el equipo más traicionero que he tenido en mi vida. Nada más que hijos de puta", sentenció el extécnico madridista.