Así lo afirmó el arqueólogo Alfredo M. Barbagallo, presidente de la asociación Arte e Mistero de Roma.
La historia del Santo Grial, que muchos consideran leyenda, es tema de la novela del ciclo arturiano Perceval, escrita en francés por Chrétien de Troyes entre 1170 y 118.
La "copa" fue abordada de forma más polémica por Dan Brown en El Código da Vinci, donde se habla que el grial no es un objeto sino que María Magdalena, quien habría dado descendencia a la sangre de Cristo.
Según Barbagallo, el Santo Grial se halla en la basílica romana de San Lorenzo extra muros, si bien su rastro se perdió en el 258 durante la persecución de Valeriano, cuando los tesoros eclesiásticos (entre ellos un Sacro Cáliz) fueron entregados por el papa Sixto II al diácono Lorenzo, que murió cuatro días después.
El estudioso apoya su afirmación en la iconografía medieval de la basílica de San Lorenzo en que está representado el Santo Cáliz. Estas imágenes están orientadas hacia las adyacentes catacumbas de Santa Ciríaca que, situadas debajo del templo, deberían conservar la reliquia.
(Agencias)