Cartas de León Tolstoi lo muestran como a un hombre polifacético
La correspondencia de León Tolstoi (1828-1910), traducida y publicada por primera vez en México, revela a "un hombre polifacético e inabarcable", que al mismo tiempo aprendía letras muertas y el oficio de zapatero.
La correspondencia de León Tolstoi (1828-1910), traducida y publicada por primera vez en México, revela a "un hombre polifacético e inabarcable", que al mismo tiempo aprendía letras muertas y el oficio de zapatero.
Así lo describe en entrevista con agencia EFE la mexicana Selma Ancira, quien tradujo una selección de la correspondencia del escritor ruso.
Ancira afirma que a través de esas cartas y del diario del escritor ruso se puede hacer "la "autobiografía que nunca escribió Tolstoi", porque decía que no sabía si su literatura valía y si se iba a leer dentro de cien años o se olvidaría en cien días.
La especialista, quien presentó la semana pasada en Ciudad de México el primero de los dos volúmenes de la "Correspondencia de León Tolstoi (1842-1879)", dijo que su idea es que mediante los diarios y las cartas se toquen los distintos temas que le preocupaban al escritor.
Los hilos conductores para seleccionar las 200 cartas que se incluyen en el primer volumen fueron: "Tolstoi y su relación con la literatura, lo que escribe y lo que lee; Tolstoi y el mundo que lo rodea, sus opiniones sobre la industrialización, la liberación de los campesinos y la servidumbre, y Tolstoi y su familia".
Destacó que el autor trata estos temas de manera distinta cuando los aborda para sí mismo en su diario que cuando lo hace para el destinatario de sus misivas.
El escritor de "Anna Karenina" cultivó el género epistolar desde que tenía 14 años, según comentó Ancira y dice que aunque en aquella época aún no se apreciaba la vena literaria que explotaría en los años posteriores, si se ve la necesidad que tenía de escribir.
Ancira, quien estudió filología en la Universidad Estatal de Moscú, señaló que su pasión por la obra de Tolstoi nació hace tres décadas cuando asistió a un seminario sobre los diarios del autor de "Guerra y paz" y "La muerte de Ivan Ilich".
"El profesor me descubrió a un Tolstoi de la manera más increíble. Me presentó al Tolstoi que aprendía letras muertas para leer a Homero o la Biblia; al que aprendía a hacer zapatos porque quería aprender un oficio manual; al que escribía 'Anna Karenina' y al Tolstoi que sufría horrores cuando se le muere una hija", dijo.
Tres décadas después de su primer acercamiento, Ancira se encontró "con ese Tolstoi de múltiples lecturas, polifacético e inabarcable".
Las primeras cartas escritas por Tolstoi eran dirigidas a su tía Tatiana Alexándrovna que fue quien cuidó a los hermanos Tolstoi cuando quedaron huérfanos.
Ancira señaló que la tía Tatiana fue una figura importante en la vida de Tolstoi, ya que se enamoró de ella e incluso le pidió que fuera su esposa y, aunque ella sentía el mismo amor, nunca se casaron.
Una de las cartas preferidas de la traductora es una que escribió Tolstoi en el Cáucaso en la que habla de un amigo y de lo que significa la amistad.
Otra de las misivas conmovedoras hasta las lágrimas fue la que el ruso escribió a la muerte de su hija, en la que describe cómo se le va la vida en sus brazos.
También le impactó una carta en la que Tolstoi habla en contra de los periodistas, los periódicos y las revistas y dice que no hay que leer nada porque todo es horrible.
Selma Ancira regresará a Moscú el próximo año para seleccionar las otras 200 cartas que incluirá en el tomo dos de la "Correspondencia de León Tolstoi", que publicará en noviembre del 2007.
Dice que su relación con Tolstoi no terminará ahí, ya que quiere hacer un volumen con sus escritos filosóficos y religiosos, y "será la primera vez que se publicarán en México".
(Agencias)