El país que acogió a Julio Cortázar, así como otras naciones que se vieron cautivadas por la pluma del escritor, tienen programadas una serie de actividades en comemoración al aniversario del lanzamiento de una de las novelas fundadoras del "boom" literario latinoamericano de los años 60.
Aunque no se pueden precisar fechas exactas, las crónicas de la época señalan que la obra calificada como uno de los libros que marcó un antes y un después en la modernidad de las letras latinoamericanas, salió un 28 de junio de 1963.
Por ello, los argentinos tienen pensado realizar una muestra homenaje de la primera edición de la historia escrita por él, sumándose a México, quienes no tuvieron mejor idea que pintar más de 50 juegos de rayuela en la que participaron numeroso jóvenes en un intento de atraerlos hacia este autor.
El juego obedece a la característica más saltante de este libro que son los tres modos de lectura diferentes que proponía el literato a sus seguidores. Sin un orden en la estructura, el autor proponía un juego lúdico en el que sin importar el capítulo donde se iniciara, siempre se terminaba leyendo una nueva historia.