Por primera vez en la historia, una máquina creada por humanos logró acercarse como ninguna otra al Sol. Desde la atmósfera solar, a un millón de grados y con vientos de hasta 150 kilómetros por segundo, la sonda solar Parker buscó descifrar por qué la corona solar tiene temperaturas tan extremas.
Mucho más adentro, por el contrario, estas llegan a los 5 mil grados. A 24 millones de kilómetros de distancia, se obtuvo datos sobre algunos de sus fenómenos, como ondas de plasma, campos magnéticos y vientos solares que se originan según los primeros datos, en las manchas solares.
Conocer de cerca la estrella permitirá entender cómo se forman las auroras boreales, los problemas satelitales y cómo proteger a los astronautas que, ahora, se preparan para las misiones en la Luna y en Marte.
Para el 2025 una nueva misión planea introducirse en la corona del Sol, la cual permitirá conocer su superficie y su naturaleza.
