El electo presidente regional, Waldo Ríos, negó tener vínculos con el detenido César Álvarez tras acudir al Congreso para pedir que la comisión del caso Áncash lo cite en otra fecha.
“Nunca he tenido trato con este señor. Hay una mano oscura que, no sé por qué, hace toda esta campaña en contra mía en base a agresiones, calumnias y difamaciones”, expresó.
Asimismo, fue enfático al asegurar que si bien conoce a Ángel Duran, consejero que perteneció al entorno de la cuestionada exautoridad, “no tiene por qué responder por actos ajenos”.