Tras el colapso del puente de Chancay, que dejó tres personas fallecidas, se ha encendido las alarmas sobre el estado de otros puentes en el país. Uno de los más preocupantes es el puente Rojo, que une Huaral con Palpa y tiene más de 150 años de antigüedad.
Este puente es vital para la conexión con distritos como Aucallama, Cruz de Matucana y Nuevo Huaral y presenta graves daños en su estructura debido al aumento del caudal del río, lo que ha generado preocupación entre los pobladores.
Daños en estructura y vehículos pesados
El puente ‘Rojo’ muestra rajaduras profundas en sus bases norte y sur, las cuales podrían desprenderse en cualquier momento. Además, una de las bases centrales ya se ha desprendido por completo, lo que aumenta el riesgo de un colapso inminente.
Pese a que hay un letrero que indica que solo deben transitar vehículos ligeros, conductores de camiones y trailers ignoran la advertencia, poniendo en mayor peligro la integridad del puente y de quienes lo cruzan.
Ministro de Transportes prometió puente modular
Fernando Cárdenas, alcalde provincial de Huaral, confirmó que tanto el Gobierno Regional como el Ministerio de Transportes están al tanto del estado crítico del puente. Además, reveló que hace unos meses sostuvo una reunión con el titular de Transportes, Raúl Pérez-Reyes, quien le prometió la construcción de un puente modular como solución temporal.