El ministro de Educación, Morgan Quero, informó que se han separado a 459 docentes involucrados en casos de abuso sexual en la región de Condorcanqui, donde se denunciaron violaciones a más de 500 niñas y niños de las comunidades awajún. Durante una entrevista con Buenos Días Perú, Quero aseguró que los responsables no volverán a ejercer como docentes y que su sector ha trabajado para acompañar a las familias afectadas en la presentación de denuncias ante el Ministerio Público.
“Se han separado a otros violadores disfrazados de docentes. Estamos actuando desde el sector educación de manera firme. Estos 459 docentes no volverán a participar en el esfuerzo educativo en las zonas del norte y del oriente del país”, declaró el ministro a BDP.
En su momento, el titular del Minedu fue duramente criticado por calificar estas agresiones como una “práctica cultural” en los pueblos amazónicos, comentarios que provocaron rechazo en organizaciones de derechos humanos y líderes indígenas.
FALTA DE CONDENAS JUDICIALES
Quero reconoció que, aunque los profesores han sido separados del sistema educativo, no hay condenas judiciales para los implicados. “La condena de cualquier delito implica una decisión del Poder Judicial, y por eso invocamos a esta institución a avanzar en ese sentido”, añadió.
El ministro también destacó que en Lima Metropolitana se han separado a 603 trabajadores de instituciones educativas por sentencias relacionadas con violación, acoso sexual, homicidio y terrorismo. Según el funcionario, estas acciones responden a esfuerzos recientes del Ministerio por reforzar los filtros en el sistema educativo.
En cuanto a medidas preventivas, Quero mencionó que su cartera está trabajando en la educación sexual integral y en redes de protección comunal en Condorcanqui. Estas iniciativas buscan empoderar a niños y niñas para que puedan identificar y denunciar posibles situaciones de riesgo.
“No estamos claudicando en nuestra labor preventiva. Estamos trabajando articuladamente con las comunidades aguarunas y awajún para proteger a los niños en las residencias estudiantiles. Esto ha permitido detectar casos, llevar denuncias y sensibilizar a las comunidades”, señaló.
