En una operación de alto riesgo en lo más profundo de la selva huanuqueña, agentes del Departamento de Operaciones Tácticas (Depot) de Tingo María incursionaron en un laboratorio clandestino de procesamiento de clorhidrato de cocaína. La incursión ocurrió en la madrugada, cuando los efectivos antidrogas tomaron control del campamento a balazos, y se enfrentaron a los remanentes de grupos terroristas que brindaban seguridad al laboratorio.
GOLPE AL NARCOTRÁFICO
El operativo resultó en la destrucción de varios moldes y equipos utilizados para la producción de cocaína. Durante la intervención, se encontraron grandes cantidades de hoja de coca secada y preparada para el procesamiento. Según el general Zenón Loayza, jefe de la Dirección Antidrogas (Dirandro), estas operaciones están directamente relacionadas con grupos que reciben apoyo de remanentes terroristas de la organización Sendero Luminoso.
"Hemos decomisado 118 toneladas de droga hasta la fecha, superando nuestra meta de 108 toneladas para este año", señaló el general Loayza. El campamento incursionado estaba acondicionado con dos fosas de maceración y múltiples paquetes de cocaína en proceso.
Además del equipo táctico de Tingo María, participaron agentes del Departamento de Operaciones Tácticas de Tarapoto, quienes a balazos lograron hacer retroceder a los delincuentes que protegían el lugar. La operación tuvo lugar en una zona de alta peligrosidad dentro de la región de Huánuco, un área clave en el tráfico de drogas.
La policía continúa con investigaciones en la zona para desmantelar otros laboratorios que operan de manera clandestina, así como identificar posibles nexos con grupos criminales y terroristas que aún operan en las regiones de Huallaga, Loreto y Ucayali.
