Luego del fatídico terremoto que destruyó parte de la región de Pisco (Ica), gran parte de población pude reconstruir sus viviendas y seguir adelante; sin embargo, hay un sector que aún sufre después de 15 años del siniestro.
Un grupo de damnificados ocuparon un predio cerca a la playa, tras perder sus viviendas en el centro de la ciudad. Ahora, los dueños del terreno están desalojando a los agraviados, quienes aún se sienten abandonados por las autoridades.
Las víctimas están solicitando al ministro de Vivienda y al presidente Pedro Castillo que evalúen su caso y recibir apoyo de su parte.