El fallecimiento de un menor de un año de edad a causa de la COVID-19 conmocionó a todos en la región de Tumbes, al tratarse del primer niño de la región en morir a causa del coronavirus.
Según el personal médico, el bebé llegó sin vida al centro de salud, debido a que los padres del menor no trasladaron a su hijo a tiempo por creencias religiosas.
“Lamentablemente la familia y por las condiciones religiosas que tienen ellos, lo han tenido en casa, no lo han llevado a ningún servicio de salud, han estado orando por él en casa y cuando ya lo han visto mal, han tratado de llevarlo, y el niño ha llegado cadáver”, señaló Romel Ventimilla, Director Regional de Salud de Tumbes, sobre la trágica noticia.
El viceministro de Salud, Augusto Magno Tarazona, llegó hasta esta región para dar inicio a la vacunación de menores de 10 a 11 años y con comorbilidades de 11 a 5 años. Allí, el funcionario también se pronunció respecto a la muerte del menor.
“Nos ha conmovido bastante esta noticia de tener el primer niño con COVID fallecido en esta región y definitivamente lo que tenemos que hacer es vacunar a los niños, pero también a los padres, porque tenemos entendido que ha habido dificultades en las vacunas a los padres de este niño, en ese sentido, decirle a la población, las vacunas, salvan vidas” señaló el viceministro de Salud.
Cabe señalar que sobre el proceso de inoculación en esta región el país, el representante de Salud, indicó que la vacunación de todos los menores está cubierta en su totalidad.
