La actitud sospechosa de los menores llamó la atención de los policías. Fueron intervenidos durante la hora de inmovilización obligatoria, cuando estaban a bordo de una bicicleta.
Cuando los policías les pidieron abrir las mochilas para revisar lo que llevaban dentro, grande fue la sorpresa al encontrar al interior varias réplicas de armas de fuego.
Al inicio estos adolescentes trataron de negar que los objetos fueran suyos, pero ante las preguntas de los agentes no les quedó otra que confesar que realmente les pertenecía.
Ambos menores fueron trasladados a la dependencia policial para las investigaciones correspondiente.