Un paciente con síntomas sospechosos de coronavirus huyó del hospital Rezola y sembró pánico en las calles de San Vicente de Cañete.
Se movilizaba con mascarilla de oxígeno por algunas cuadras, luego intentó abordar algunos mototaxis para regresar a su casa, mientras el personal paramédico intentaba convencerlo para que regrese.
El adulto mayor, luego de caminar unas cuadras más, se desvaneció y fue llevado al hospital en una silla de ruedas.