Un grupo de pobladores de una comunidad del Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem) no tuvo mejor idea que castigar a tres delincuentes rozándoles varias plantas de ortiga por todo el cuerpo.
Como se observan en imágenes, los pobladores les pasan la planta de ortiga por todo el cuerpo y los delincuentes no dejaban de gritar. Asimismo, pidieron perdón para que los pobladores dejarán de castigarlos.
Ellos se encuentran cansados y mortificados de la delincuencia que impera en la comunidad de Atalaya. Por ello, realizaron este tipo de acciones correctivas debido a que no cuentan con una comisaria cercana.