Marco Antonio Marky, de 54 años viajó a Venezuela después de 9 años para ver a sus hijos, pero halló la muerte el pasado jueves 19 de enero cuando retornaba a casa en un auto y fue acribillado por policías en plena carretera.
“Un camión de prensa los cerraba… ellos bajaron la velocidad y se estacionaron. Piden ayuda a la Policía Nacional y reciben ayuda de balas”, declaró la hermana de la víctima.
Fue así que el deceso de Marco Antonio enlutó a su familia en Venezuela y Perú. En ese país, peritos de investigaciones científicas, penales y criminalísticas continúan indagando sobre lo ocurrido. Como se sabe, en Venezuela, el peligro en las calles sería una constante.
La familia Marky continúa a la espera del pronunciamiento y agilización de los trámites por parte de la Cancillería para poder repatriar el cuerpo.
